Risotto con Amarone y achicoria

Foto y receta: Dino Joannides, Semplice

Italia es Italia. Sin más. En moda, coches y cocina habrá nacionalidades que lo hagan mejor pero, desde luego, no más bonito. Por si acaso no sabes de lo que estoy hablando, prueba a preparar este risotto de Amarone y achicoria al que, por supuesto, hay que acompañar con mucho parmesano. Hemos encontrado la receta en Semplice y, como está en inglés, además de dejarte el link, vamos a contarlo paso a paso, ¡por si acaso!

Ingredientes para 2-4 personas

Al lío:

Lleva el caldo a ebullición y déjelo hervir a fuego lento mientras se cocina el plato. Corta la mitad de la mantequilla y ponla en el congelador, derrite la mantequilla restante en una cacerola y fríe la cebolla suavemente hasta que se quede blandita, y para cuando comience a dorarse. Agrega ahora el arroz, sube el fuego y revuelve bien.

Añade una copa de vino y sigue moviendo todo a fuego alto hasta que se haya evaporado y repite el proceso con la segunda copa. Baja el fuego a medio-bajo y comienza a agregar un caldo a la vez, mezclando cada adición hasta que se absorba casi por completo. El arroz debe permanecer húmedo y moverse en olas cuando se mezcla, nunca debe volverse seco o pegajoso. Cuando el arroz comience a ablandarse (después de unos 13 minutos, pero compruébalo), agrega el esto del caldo en pequeñas cantidades y pruébalo regularmente hasta que esté a tu gusto

Mezcla ahora la achicoria, añade la mantequilla congelada y ralla unos 60 g de queso parmesano. Ahora viene la mejor parte… mezcla todo hasta que el risotto sea rico y cremoso. Qué pinta… déjalo reposar durante 2 o 3 minutos y sírvelo inmediatamente con el resto del queso raspado en cada porción

Borscht, sopa de remolacha y ternera

Foto y receta: Patty’s cake

Cuando encontramos esta receta borscht, sopa de remolacha y ternera polaca en el blog de Patty’s cake, tuvimos clarísimo que tenía que estar en nuestro calendario. Primero, por rica, sana y nutritiva. Después, porque las fotos son espectaculares y por último, pero no menos importante, porque compartimos al 100% su idea de que la comida nos une. No puede ser de otra manera.

La gastronomía nos une a otras personas, claro está, porque rara vez nos juntamos a celebrar o charlar sin comida por delante, ya sea un guiso, una tapa o un bizcocho con un café. Pero, además, la comida reconcilia con nosotros mismos, porque pocas cosas son más evocadoras que un sabor o un aroma. ¿O por qué eligió Proust una magdalena? No es casual.

Codillo de ternera estofado y vino blanco

¿Quién dijo que hay carne de primera o tercera? Esta división sólo funciona para el fútbol, y cada vez es más discutible. En el caso de la carne de ternera, debemos hablar más de conocimiento y técnica que de jerarquías, como demuestra esta espectacular receta de codillo de ternera estofado y vino blanco extraída de la revista Beef.

Tiempo de preparación: 30 minutos, más 3 horas de estofado.

Ingredientes para 4-6 raciones

  • 1 codillo de ternera
  • sal marina
  • pimienta recién molida
  • 2 CS de aceite
  • 2 CS de harina
  • 600 gr. de raíz de escorzonera
  • 4 zanahorias
  • 3 cebollas
  • 3 tomates
  • 1/2 litro de carne de ternera
  • 400 ml de vino blanco
  • 1 CS de tomate concentrado
  • 1 ramillete de salvia
  • 4 hojas de laurel
  • 1 ramillete pequeño de perejil
  • 3 dientes de ajo
  • 1 trozo de piel de limón bío
  • 1 CS de AOVE

Al lío. Una vez que hayas recopilado todos los ingredientes (o similares), precalienta el horno a 200 grados utilizando el fuego superior e inferior. Mientras salpimentas el codillo, calienta el aceite en una cazuela apta para el horno. Sofríes en ella el codillo y espolvoreas harina de manera uniforme sobre él para meterlo destapado en el horno caliente y tostarlo ligeramente durante 20 minutos.

Aprovechamos este tiempo para limpiar y pelar la raíz de escorzonera, las zanahorias y las cebollas. Estas últimas se parten por la mitad. Lava los tomares y recorta el troncho.

Saca la cazuela del horno  y caliéntala sobre la lumbre. Añade las verduras y las sofríes brevemente con la grasa del asado. A continuación vierte el caldo de ternera y lo llevas a ebullición, añadiendo el tomate concentrado, la salvia y las hojas de laurel. Tapa la cazuela y estofa el codillo en el horno caliente durante, al menos, 3 horas hasta que quede bien tierno. Atento, porque cuando lleve aproximadamente una hora debemos sacar la escorzonera y las zanahorias y reservarlas.

Antes de servir el codillo, lava el perejil y sacúdelo para retirar el agua sobrante, pela el ajo y pica todo finamente junto con la piel del limón. Esta mezcla es lo que llamamos gremolata.

Saca la cacerola del horno, saca el codillo pero mantenlo caliente mientras reduces el caldo del estofado en la lumbre hasta que espese ligeramente.

A continuación, caliente el aceite en una sartén y sofríe las zanahorias, la escorzonera y un poco de salvia. Condimenta con sal y pimienta. Termina esparciendo la gremolata sobre el codillo para servirlo con la salsa y las verduras estofadas.