El secreto de tu barbacoa

Un buen chuletón es un buen chuletón. Aquí y en Pekín. Pero siempre sabe más rico si es a la barbacoa. ¿Por qué? ¿Será por cocinar al aire libre o por el ritual? ¿Cuál es el secreto de la barbacoa, la forma de cocinar más ancestral y que, seguramente, sea la que menos ha evolucionado? Ni idea, pero nuestra intuición (y práctica) nos lleva por estas pistas:

  • Está claro, sin calor, no cocinamos. Podemos obtenerlo de múltiples formas, pero no todos permanecen ni consiguen la misma intensidad (¿verdad, microondas?). Una buena barbacoa de gas produce un calor rápido y potente, pero que no permanece ni se expande de la misma forma que una barbacoa de carbón, ese mago que permite que la carne se cocine y dore despacito. Utiliza leña de encina para que el efecto sea aún mayor. Y añade sarmientos o hierbas aromáticas para potenciar el sabor.
  • Si puedes regular la altura de la parrilla podrás jugar con la intensidad de calor que necesitan tus piezas en función de su grosor. Si no puedes hacerlo, también puede ser interesante repartir las brasas y duplicar su cantidad en cada una de las mitades de la barbacoa. Esto te permitirá preparar carne y verduras a la vez, por ejemplo, y jugar con el calor para cocinar a dos tiempos. Puedes poner la carne primero sobre el lado más fuerte para dorarla bien por ambos lados en uno o dos minutos, y después asarla uniformemente en la zona menos caliente. Muchas posibilidades, una única regla: que el alimento no toque las llamas.
  • Al hilo de este último comentario, no te olvides de aprovechar el calor de las brasas al máximo y preparar patatas, chorizo o morcilla envolviéndolos en papel de aluminio y cubriéndolo con el carbón.

¿Hemos desvelado el secreto de la barbacoa? No lo sé pero, por si acaso, seguiremos investigando. Todo sea por vosotros, jeje.

¿El mejor cuchillo para cortar carne?

Foto: David Gussoni

Ahora que casi no salimos de casa y cocinar se ha vuelto uno de los placeres (o castigos) del día, podemos caer en la tentación de volvernos locos con miles de recetas imposibles y llenar los cajones con instrumentos que, hasta que no los vimos, no sabíamos que los necesitábamos con urgencia en nuestra vida. Tranquilidad, antes de arruinar nuestro bolsillo, que no está la cosa para bromas, vamos a pararnos a pensar un poco. Hoy toca un instrumento clave: el cuchillo para la carne.

  • Hay un cuchillo para cada persona. También para cada situación. Si compras los filetes de lomo, por ejemplo, y pides al carnicero que te lo corte como tú quieres, limpito, limpito, no necesitas un chuchillo deshuesador, con un buen juego de cuchillos chuleteros estás servido.
  • Los cuchillos buenos suelen ser caros, por eso es mejor pensar qué necesitas e invertir en dos o tres en lugar de comprar un set completo con algunos que sí, quedan muy pintones en la encimera, pero que no vas a usar jamás.
  • Hablando de dinero, que haya tantos tipos de cuchillos como presupuestos hará que encuentres el tuyo. Tienes que fijarte bien en qué quieres invertir: tamaño, material o durabilidad.
  • La mejor opción es optar por hojas de acero inoxidable pero, recuerda, inoxidable no quiere decir incorruptible, así que limpia y seca bien el cuchillo después de cada uso para evitar la oxidación y la corrosión.
  • Y si quieres parecer muy pro a la hora de comprar, fíjate bien en la fórmula del acero, cuya composición varía entre cuchillos. Un truco: si el fabricante está orgulloso del acero que está usando, lo mostrará en la hoja.

Ahora que has comprado los cuchillos que necesitas, ¿dónde los guardas? Todo tiene sus pros y sus contras:

  • Soporte imantado: Frente a la ventaja de tener tus cuchillos a mano, a la vista y perfectamente organizados, hay que tener en cuenta que, si no eres cuidadoso, golpearás tus cuchillos cada vez que los coloques, causando marcas y ralladuras que, finalmente, influyen en el corte.
  • Taco de madera para cuchillos: La hoja de tu chuchillo estará protegida, pero su limpieza y secado ha de ser muy meticuloso para no favorecer la aparición de bacterias. Además, como no suelen ser personalizados, no tienen por qué encajar con los cuchillos que hayas elegido.
  • Cajón: Tus cuchillos estarán protegidos, pero también hay que ser muy cuidadoso con la limpieza y el secado. Y contar con ese cajón vacío, algo complicado en cocinas cada vez más pequeñas.

Y, no te olvides, por muy bueno que sea el cuchillo no se mantendrá afilado para siempre. Es imprescindible contar con una buena piedra de afilar o, en su defecto, un buen profesional cerca de casa.

Feliz, y cárnico, Día del Libro

La música y la lectura me han salvado la vida un par de veces. Vale, puede que no haya sido de forma literal, como lo haría un cirujano, pero sí que me han ayudado a hacer que la vida merezca la pena ser vivida. Otras veces quedan un poco de lado pero siempre, siempre, ambas me acompañan de alguna u otra manera. Por eso me gusta tanto el 23 de abril, el Día del Libro, más aún si lo pasas en Castilla y León donde siempre es fiesta.

El 23 de abril, en Segovia, hablamos de dulzainas y libros, sí, añado carne y campo, también. Así tenemos el 95% de nuestro ADN:

  • Como hoy estamos un poco chovinistas, vamos a empezar recomendando La cocina segoviana, tradición, transición y evolución, recopilación de recetas de Raimundo Sanz y Jonathan Barroso, del Restaurante La Postal, editado por Derviche, una editorial muy vinculada a Segovia. Que para eso los autores son de nuestro pueblo.
  • Todo sobre la carne, un libro de lujo que resuelve de forma gráfica todas las dudas que tengas sobre razas, cortes, utensilios, recetas… Contenido y continente muy interesante porque, además de contarlo bien, lo cuentan bonito. También se come con los ojos, ¿no? Pues aquí está bien aplicado.
  • Carne. El libro definitivo. Estamos deseando hacernos con el, habrá que ir hablando con los Reyes Magos porque escrito por Anthony Puharich, dueño de la mejor carnicería del mundo, seguro que hay muchos detalles que estudiar.
  • 100 recetas de pan de pueblo, de Ibán Yarza. Porque es el alimento de moda de la cuarentena (quién nos lo iba a decir, las abuelas tienen que estar alucinando) y, además, cualquier comida en bocadillo está mucho más rica. Haced la prueba.
  • Confesiones de un chef, de Anthony Bourdain, cocinero y divulgador gastronómico sin pelos en la lengua pero, sobre todo, un auténtico vividor, de los de verdad. Su manera de mirar y empaparse de este mundo es de agradecer en tiempos de tanta levedad.

Hablábamos de dulzainas, libros, carne y campo, ¿no? Pues para terminar, falta la recomendación final, la recomendación de recomendaciones: cualquier cosa de Don Miguel Delibes. Ahora sí que sí, completamos nuestro ADN castellano.

El solomillo perfecto

Foto: Cárnicas Pedro Gómez

Nos encanta celebrar cuando toca. Y cuando no, también. Ya os lo hemos dicho mil veces. Por eso, si mañana es San Valentín y vamos a festejar que nos queremos, hoy nos sumamos al Día del Soltero. Porque sí. Porque es jueves y nos apetece. ¿Y cómo vamos a hacerlo? Con un buen homenaje: con un solomillo de ternera rico, rico.

Vamos a ir a ver a nuestro carnicero de confianza (ya sabéis, hastag #comerciolocal) y pedirle la pieza más especial que tenga, preguntarle cómo cocinarlo y, por si acaso, comentarle qué le parecen estos consejos:

  • Atempera bien la carne. No puede estar fría, así que deja que repose un rato fuera de la nevera.
  • Utiliza aceite de oliva de calidad. Y espera a que esté bien caliente, pero bien caliente, para echar la carne a la sartén o plancha.
  • Como en la vida, no marees. No des vuelta y vuelta al solomillo, espera el tiempo necesario para cada lado. Te contamos un truco que suele funcionar: aguanta tantos minutos como centímetros de grosor tenga la pieza. Si mide dos centímetros de ancho, dos minutos vuelta y vuelta por cada lado.
  • Respecto a la sal…eterna polémica. A mi me gusta salar la carne nada más sacarla de la plancha, pero a quien prefiere antes o durante. Prueba las tres formas, y elige la que más te guste a ti.

Cada maestrillo, tiene su librillo, ¿cuál es tu biblia? ¡Cuéntanos! Ah, y todo lo aplicado hoy, sirve también para mañana. Feliz San Valentín.

Churrasco de ternera con chimichurri casero

Foto: Cocinillas

No sé como nos atrevemos a publicar una receta de churrasco de ternera al horno en plena época de barbacoas y fiestas al aire libre. No estamos locos no porque, además de defender que hay veranos fresquitos por ahí, esta receta es la excusa perfecta para enseñaros a hacer el auténtico chimichurri casero, ¡delicioso! Así que pincha en el enlace y descubre una riquísima receta de churrasco de ternera con chimichurri casero de la mano de Cocinillas de El Español.

Otro punto fuerte de esta receta es que demuestra la versatilidad de la carne de ternera. Una misma pieza, bien cortada y explicando a nuestro carnicero de confianza para que la queremos, puede cocinarse de dos formas diferentes obteniendo resultados riquísimos. Si el producto es bueno, y la compañía más, la velada va a resultar perfecta cocines como cocines.

Ensalada de pasta con pastrami

¿Sin ideas para preparar el tupper para la oficina? Sigue leyendo, esta ensalada de pasta con pastrami te va a convencer.

Foto: Carne y Salud

Son muchos los que comen fuera de casa todos los días, por lo que planificar el contenido de la fiambrera es mucho más importante de lo que pensamos puesto que, además de cambiarnos el humor, un buen almuerzo nos va a proporcionar la energía necesaria para el resto del día. Carne y Salud nos deja algunas ideas en este post, del que nosotros destacamos esta receta de ensalada de pasta con pastrami. Un toque italiano perfecto para llevar a la oficina y, por qué no, para preparar un picnic ahora que llega el buen tiempo.

Ya os explicamos en su día qué es el pastrami, un embutido compuesto de carne de ternera de intenso sabor, perfecto para acompañar algo tan neutro como la pasta.

Empanada de carne de ternera

Foto: Patty’s cake

 

El orden y la organización en la cocina son una de las tendencias más fuertes en las redes sociales. Batch cooking, se llama. Como defensores de cualquier idea que haga que cocinemos más y, por tanto, que comamos mejor, apoyamos el batch cooking, pero reivindicamos a las pioneras, las amas de casa que sabían qué comprar, dónde y cuándo hacerlo, cómo cocinarlo y, sobre todo, cómo aprovecharlo. De ahí surgen deliciosas recetas como las croquetas, tortillas, guisos y esta empanada de carne de ternera que nos enseña Patty’s cake, que es nuestra receta del mes de mayo.

Arremángate y ponte manos a la masa para sorprenderte con el sabor de esta receta, perfecta para tener la cena lista un día de mucho lío o de parque hasta tarde, ahora que la luz solar nos regala horas útiles. Una empanada, ensalada, algo de fruta y tienes una comida nutritiva, deliciosa, fácil y perfecta para niños y mayores.

Albóndigas de ternera en salsa

Foto: pequerecetas.com

 

Si los nutrientes son importantes para un adulto, son clave para el correcto desarrollo de los más pequeños. ¿Cómo garantizar que están comiendo de la mejor forma posible? Cocinando, cocinando y cocinando. Eso sí, hay que hacerlo con productos frescos y de calidad, claro está. Da trabajo, pero es imprescindible. Y siempre existen recetas mágicas como estas  albóndigas de ternera en salsa de Pequerecetas que son buenas, bonitas, baratas, nutrientes y que, además, son perfectas para congelar y disfrutar poco a poco. ¿No lo crees?

Además, Pequerecetas nos da algunos consejos para que las albóndigas de ternera en salsa sean menos calóricas y gusten a niños y mayores porque están deliciosas e, imprescindible, no se hacen bola. Si te gusta la idea, tenemos más recetas de albóndigas de ternera en nuestro blog. Echa un vistazo y sorpréndete. Nadie podrá decirte de nuevo que comer ternera es aburrido…

Pastel de carne de ternera o cottage pie

Foto: Cuuking!

 

Las recetas que perduran a lo largo de los tiempos suelen ser aquellas que, evidentemente, están ricas y además combinan ingredientes tradicionales fáciles de conseguir con técnicas culinarias sencillas. No hay más secretos, por algo será. Este pastel de carne de ternera o cottage pie es un buen ejemplo de ello. Aunque aquí en España no sea tan, tan popular, es un clásico de la cocina inglesa y, por tanto, exportado a todos los países de la Commonwealth.

¿Quieres saber por qué se llama así? ¿Y seguir la receta llena de entusiasmo de Cuuking!? Pues sigue leyendo, que estamos seguros de que te va a gustar.

Kofte (albóndigas turcas de ternera)

Foto: El Comidista

 

Si por algo nos gustan las recetas que selecciona El Comidista es porque suelen ser fáciles, ricas, y estar explicadas para que cualquiera, hasta el que agarra por primera vez una sartén, sepa seguirlas. Si además, como es el caso, le dan un toque internacional para que te luzcas, mejor que mejor. Así que ya sabes, prepara una ensalada e invita a tus amigos a cenar kofte, que no es otra cosa que albóndigas turcas de carne de ternera.

Como verás en la receta, la dificultad es mínima. Quizás lo más complejo sea elegir un vino que siga dando ese toque exótico al menú (bendito problema, ¿verdad?).