El solomillo perfecto

Foto: Cárnicas Pedro Gómez

Nos encanta celebrar cuando toca. Y cuando no, también. Ya os lo hemos dicho mil veces. Por eso, si mañana es San Valentín y vamos a festejar que nos queremos, hoy nos sumamos al Día del Soltero. Porque sí. Porque es jueves y nos apetece. ¿Y cómo vamos a hacerlo? Con un buen homenaje: con un solomillo de ternera rico, rico.

Vamos a ir a ver a nuestro carnicero de confianza (ya sabéis, hastag #comerciolocal) y pedirle la pieza más especial que tenga, preguntarle cómo cocinarlo y, por si acaso, comentarle qué le parecen estos consejos:

  • Atempera bien la carne. No puede estar fría, así que deja que repose un rato fuera de la nevera.
  • Utiliza aceite de oliva de calidad. Y espera a que esté bien caliente, pero bien caliente, para echar la carne a la sartén o plancha.
  • Como en la vida, no marees. No des vuelta y vuelta al solomillo, espera el tiempo necesario para cada lado. Te contamos un truco que suele funcionar: aguanta tantos minutos como centímetros de grosor tenga la pieza. Si mide dos centímetros de ancho, dos minutos vuelta y vuelta por cada lado.
  • Respecto a la sal…eterna polémica. A mi me gusta salar la carne nada más sacarla de la plancha, pero a quien prefiere antes o durante. Prueba las tres formas, y elige la que más te guste a ti.

Cada maestrillo, tiene su librillo, ¿cuál es tu biblia? ¡Cuéntanos! Ah, y todo lo aplicado hoy, sirve también para mañana. Feliz San Valentín.

Ternera fría marinada

Foto: El Comidista

 

Normalmente son el salmón o la anchoa los pescados que enterramos en sal y azúcar para deshidratarlos y que se conserven por más tiempo, consiguiendo así cocinarlos sin necesidad de calor. Pero este proceso también puede aplicarse a cualquier pieza de carne de ternera tierna y sin demasiada grasa, ¿quién puede resistirse a un menú protagonizado por ternera fría marinada?

El Comidista propone una variante con un toque oriental gracias a la soja y el jengibre pero, respetando la presencia de sal y azúcar, cualquier propuesta es válida. Yo la haré con ginebra y eneldo, a ver qué resultado ofrece pero, desde luego, la comodidad y sencillez ya me han convencido.